O Museo da Salazón A Pedrafeita

La Taberna está un poco escondida, justo detrás del ayuntamiento en una paralela al paseo. Generosísimos platos para disfrutar de lo típico en un pueblo de mar: chocos de la ría, tortilla de patata, pulpo...
Pero además de comerse bien, el lugar está puesto con el mimo propio de un homenaje, el del propietario a su bisabuela, Ramona la Pedrafeita, que se dedicaba como muchas mujeres de Ares a la salazón. El museo-taberna está ubicado en el último almacén de salazón que sobrevive en Ares, donde precisamente trabajó su bisabuela.
Mientras cenas o te tomas una caña se puede ver la prensa de

Habíamos reservado mesa para 7 para las 3 varios días antes. Llegamos puntuales y ya habían dado nuestra mesa a otra gente. El camarero nos dice que se irán en breve y nos sentaremos en 5 minutos. Tardaron 30 minutos en ubicarnos. Cuando vamos a pedir nos informan que han agotado la carta y solo les quedan tres cosas. ¿Qué gestión es esa donde agotan el género de la mayoría de platos, tanto entrantes como principales, que ofrecen en la carta?. La comida estaba buena pero me ha parecido que son unos aficionados a la hostelería. No repetiría.

¡¡qué poco se conoce el norte de Galicia y cuántas cosas nos perdemos!! Este sitio es un buen ejemplo de local interesante por si mismo (recupera la antigua tradición de la salazón de este pueblo marinero) y por su comida: rica, abundante y barata.

Recomendabilísimo después de disfrutar un día en sus preciosas (y aún bastante vírgenes) playas.

Me gustó muchísimo este sitio que, aunque está ubicado en un feo callejón, está muy bien tematizado y se come de maravilla.
Raciones generosas, buen producto y buena idea lo de rendir un homenaje a una industria tan artesanal como la salazón en este pueblo marinero tan encantador.