Jardines secretos de Madrid: 10 oasis en plena ciudad

Lejos del bullicio de los coches, las calles repletas de gente y el ruido de las obras, es posible encontrar pequeños oasis en pleno corazón de Madrid. Descúbrelos y regálate unos minutos de paz y tranquilidad para desconectar de la ciudad y conectar contigo mismo.

Muchos de los jardines pertenecen a palacios en los que vivieron adinerados ciudadanos de la época. Hoy en día, son espacios abiertos para que los disfrute cualquiera que quiera huir de la ruidosa ciudad. 

Uno de los más especiales es el Jardín del Príncipe de Anglona, con sus árboles, setos y matorrales ordenados al más puro estilo neoclásico. Tiene varios bancos repartidos por los caminos ideales para descansar y disfrutar de esta pequeña joya del XVIII. Los Jardines del Museo Sorolla son uno de los reclamos de la casa museo del artista. Más allá de los cuadros, visitar los jardines como ver una obra de arte en sí ya que fueron diseñados por el mismo Joaquín Sorolla y a cada paso respirarás esa ambiente andaluz y árabe que quiso darle. Igualmente en un museo, pero mucho más famoso, se encuentran los Jardines del Museo Reina Sofía, decorados con obras de Miró y Calder y con dos espectaculares fuentes de estilo neoclásico.

El Jardín secreto de Hermosilla 26 es una parada obligatoria si pasas por el barrio de Salamanca. Es un pequeño patio en el que podrás encontrar tiendas de todo tipo envueltas en enredaderas y todo ello con un aire “vintage” muy acogedor. Más lejos se encuentra la estufa fría del parque Juan Carlos I es un pequeño paraíso para los amantes de la naturaleza y de las plantas en especial, ya que paseando por este jardín botánico se pueden ver decenas de especies procedentes de todo el mundo, incluso hay un estanque con ejemplares acuáticos. Otro lugar en el que lo pasará en grande un amante de la naturaleza es el Invernadero del Palacio de Cristal de Arganzuela con sus miles de especies vegetales.

Si amas los sitios donde tomar algo en un ambiente único, el Museo del Romanticismo esconde el Café del Jardín, un bonito local con una fuente ideal para tomar el té o un café con intimidad.

Por otro lado, Lavapiés esconde un pequeño huerto ecológico en “Esta es una plaza”, un espacio multiusos donde cualquiera que quiera hacer deporte, charlar, o tomar algo será bien recibido. El Jardín del Ángel es otro pequeño paraíso en plena calle Huertas, un festival de flores de colores que además podrás comprar, ya que es una floristería.

Y si te apetece disfrutar de unas vistas espectaculares en un bonito entorno, no dudes en acercarte a la Dalieda de San Francisco en Las Vistillas. Desde este jardín botánico podrás ver una panorámica de la ciudad rodeado de preciosas dalias.