Dublín en 1 día: los imprescindibles

La capital irlandesa tiene un ambiente único en Europa y está repleta de rincones que merece la pena visitar. ¡Descubre lo imprescindible de la ciudad en menos de 24 horas con este itinerario para disfrutar al máximo de Dublín en 1 día!

¿QUÉ HACER EN DUBLÍN EN UN DÍA?

Como no es demasiado grande, visitar Dublín en un día es suficiente para conocer lo mejor de la ciudad. Comenzarás el recorrido en el Castillo de Dublín, uno de los principales iconos locales. Construida en el siglo XII, esta fortaleza fue la sede del gobierno irlandés durante más de 700 años. Una vez que hayas visitado el castillo, seguirás con el Dublin City Hall (el ayuntamiento local), un majestuoso edificio de arquitectura georgiana. Podrás acceder gratis a su interior y disfrutar de sus interesantes exposiciones de arte e historia.

Una vez que hayas visto estos dos impresionantes edificios, visitarás dos catedrales medievales de la ciudad, que no pueden faltar en ninguna lista de cosas que ver en Dublín en un día. La Catedral de la Santísima Trinidad es la más antigua de las dos, mientras que la Catedral de San Patricio tiene elementos de gran belleza como su pila bautismal o su altar.

Para terminar la mañana, te acercarás hasta la Guinness Storehouse, la fábrica de cerveza más famosa y visitada del mundo. En tu recorrido por la Guinness Storehouse, además de conocer el proceso de elaboración de la cerveza, podrás comprar diversos productos de merchandising de esta famosísima marca de cerveza. Tras hacer una muy recomendable visita guiada, te invitarán a un vaso de Guinness en el bar panorámico de la fábrica. Este bar es el rincón ideal para que almuerces algo disfrutando de las mejores vistas.

Para bajar la comida, darás un agradable paseo hasta la Kilmainham Gaol, una antigua cárcel cerrada en el año 1924, que alberga un museo dedicado a la historia de Irlanda y especialmente a su proceso de independencia. Existen visitas guiadas gratuitas, pero las entradas se deben reservar con cierta antelación.

En cuanto termines la visita a la cárcel, tomarás el autobús número 40 que te devolverá de nuevo al centro de la ciudad, donde podrás visitar Trinity College, la universidad más antigua de Irlanda, fundada en el siglo XVII. Trinity es uno de los centros de estudios más conocidos del mundo tanto por su importancia académica como por sus actividades estudiantiles. Además, dentro del campus podrás conocer la Long Room, una de las bibliotecas más impresionantes de Europa.

Dejarás Trinity para ir a orillas del río Liffey, al Ha’penny Bridge, para admirar la puesta de sol más bella de toda la ciudad. Caminando por las orillas del río que cruza Dublín, llegarás hasta Temple Bar, la principal zona de fiesta de la capital. Sin duda, cualquier viaje a Dublín no estaría completo si no haces una parada en el Temple Bar Pub, el pub más famoso de la ciudad, y en el Pub Porterhouse, ideal para descubrir la maravillosa música folclórica irlandesa.