Sarajevo

Hace unos años, allí por el 2007, pude disfrutar unos meses de esta ciudad y de sus gentes. Una ciudad que salía poco a poco de un pasado drámatico, pero que una y otra vez resurge de sus cenizas. La ciudad es relativamente pequeña y se puede ver fácilmente en un fin de semana, pero es su entorno y su historia la que la hace impresionante.

Visitar el lugar del magnicidio que sirvió de iniciador de la primera guerra mundial, la bilioteca ya reconstruida y sus magníficos restaurantes hace que se pueda visitar relajadamente como parte de un circuito por otras ciudades Bosnias.

Sarajevo

Sarajevo, dice la gente nostálgica, bosnios y croatas iguales, sería la más linda ciudad del mundo si no hubiera tenido la guerra. Es cierto, es una ciudad preciosa, que me encantó. El oriente se junta con el occidente, las mezquitas, sinagogas, iglesias ortodoxas y católicas, todo el mundo convive tranquilamente en lo que se llama a veces la Jerusalem de Europa.

Los 400 000 habitantes de la capital de Bosnia y Herzegovina aman su ciudad y son felices de compartirla, de contar su historia agitada tomando un café o un burek, los pasteles de carne o de queso fresco con espinacas.

Es cierto que es una de las más bellas ciudades de Europa.

Estando ahí sentí y entendí todo lo que había visto en las noticias.Para los amantes de la historia es imprescindible ver esta ciudad.Es un país tranquilo ,no emos tenido ningún problema,esto si las careteras son bastante malas

Este lugar,me sorprendio gratamente,los olores,sabores y colores que en aquellas noches respire.el canto del imán de la mezquita ,cenando en la famosa casa del despecho y degustando carne envuelta en hojas de parra con miel,y la luna de yugoslavia que mas pedir?disfrutarlo

Este lugar,me sorprendio gratamente,los olores,sabores y colores que en aquellas noches respire.el canto del imán de la mezquita ,cenando en la famosa casa del despecho y degustando carne envuelta en hojas de parra con miel,y la luna de yugoslavia que mas pedir?disfrutarlo

Este lugar, me sorprendió gratamente, los olores, sabores y colores que en aquellas noches respire. El canto del imán de la mezquita, cenando en la famosa casa del despecho y degustando carne envuelta en hojas de parra con miel y la luna de Yugoslavia que mas pedir?

He estado en dos ocasiones de misión en Bosnia i Herzegovina, y en la segunda tuve la suerte de conocer a mi actual pareja, Azra, quien me ensenho(no tengo teclado espanhol aquí), la otra cara de Sarajevo y de su Barrio Turco. También me ensenho la belleza de este país que tiene tanto que ofrecer...Espero que esto os ayude un poco a comprenderlo.