Aeropuerto de A Coruña

Es un aeropuerto muy pequeño, apenas 4 puertas de embarque, lo que lo hace muy cómodo a la hora de llegar con poco tiempo. El control de seguridad suele ser rápido también y hay una pequeña sala VIP en la planta superior desde hace un par de meses.

No operan demasiados vuelos, y casi todo son líneas nacionales, pero sigue siendo una opción muy cómoda para viajar a Madrid, Barcelona o Sevilla.

El aparcamiento es cubierto y vigilado, con un acceso inmediato a la única terminal.

Hay un sostén “aleatorio” de alarma que está pitando constantemente. La frecuencia con la que suena no tiene comparación con ningún otro aeropuerto (por mi trabajo conozco muchos). Hay objetos o prendas que no pasan el control (en varias ocasiones me ha pasado con el calzado), y en el aeropuerto de regreso no pita.

Por otra parte, está el personal de control que, habitualmente, sobreactua y contribuye a aumentar aún más esas colas diarias.

Alguien debería controlar estadísticamente las incidencias que pasan aquí cada día, porque puedo asegurar que es bochornoso en muchas ocasiones.

Todavía en expansión, le faltan unas mejores comunicaciones con la ciudad pero que serán subsanables en un futuro no muy lejano.

Fácil acceso, el parking está bien para ser un aeropuerto.

Personal amable y cualificado. La cafetería un poco cara pero bien atendida.

Cuenta con los vuelos nacionales más concurridos y algunos internacionales.

Aunque bien situado cerca de A Coruña y se puede ir desde la tercera ronda.