Estupenda comida en Segovia
Este verano estuve un fin de semana con unos amigos en Segovia. Dando una vuelta por la plaza mayor, vimos la terraza de este restaurante y las vistas privilegiadas que tiene de la catedral, así que decidimos entrar a probarlo. Primero pedí unas croquetas de gambas al ajillo y salteado de boletus y trigueros. Después pedí el típico cochinillo asado de Segovia, buenísimo. De postre arroz con leche. Platos elaborados con productos de primera, se nota el mimo que ponen para elaborarlos. Trato excepcional, sin quejas. Volveré seguro!!