Cascada de Ardonés

La cascada de Ardonés es una de las muchas que hay en los valles colindantes al de Benasque. Ésta, en concreto, se encuentra muy cerca del pueblo de Cerler, muy conocido por sus pistas de esquí.

Para llegar a la cascada podemos hacerlo desde el pueblo, si queremos hacer unos kilómetros andando por un sendero sencillo que nos llevará al pie de esta hermosa casacada o bien a mitad de subida a la estación de esquí, en una de las curvas más pronunciadas, justo antes de llegar a los remontes, se puede aparcar el coche y desde aquí no hay más de 1 km al pie de la cascada.

Es más recomendable hacerla desde el pueblo de Cerler, pasar por debajo de la casacada y tomar el camino de vuelta. Se sale por la parte de atrás, está bien indicado y tras abandonar un camino de piedra se convierte en sendero, sólo hay que seguir el curso del arroyo hasta encontrar la cascada.

Sencilla y corta ruta muy cerca de Cerler. El sendero pasa por la Ermita de San Pedro Mártir. Subimos hacia el fondo del barranco donde se encuentra la Cascada de Ardonés. Cruzamos el barranco por una pequeña pasarela metálica.

Ahora la senda discurre por la cara opuesta del barranco y pasamos por las cascadas: el Clotet y la Mascarada.

Maravillosa ruta partiendo de Cerler bordeando el barranco de Remáscaro hasta llegar a las cascadas de Ardones.
Dificultad: Facil
Tiempo de recorrido circular: 3h
Una ruta de senderismo que no te puedes perder si te gusta la montaña.
Recomendable llevar bastones, agua y crema para el sol.

Perfecto para los amantes de la naturaleza y para desconectar en familia.