Acogida simpática
Si el hostel está lleno, Aisling House es una buena opción para pernoctar en Clifden. El dueño es un simpático irlandés de unos 45 años que habla terriblemente rápido (pero bastante claro) y que os dará toda la información que queráis, y más, sobre qué rutas hacer desde el pueblo, con mapas y todo tipo de indicaciones... Y esto como bienvenida y en unos 10 minutos!! Acto seguido, si lleváis coche, os indicará dónde podéis aparcar "gratis" y también os dirá que si tenéis algún problema en el pueblo no dudéis en contárselo que él irá a arreglarlo. Todo un figura!!
La verdad es que un lugar bastante acogedor, con unas cuantas opciones de habitaciones e incluso la posibilidad de dormir con el saco en la sala de estar que hay para compartir entre los huéspedes.
